Con la creciente conciencia sobre la protección del medio ambiente, las bolsas de embalaje biodegradables se han convertido en un nuevo favorito en el mercado. Este tipo de material proviene principalmente de almidón vegetal (como el ácido poliláctico PLA) o PBAT, que finalmente puede descomponerse en agua y dióxido de carbono en condiciones específicas de compostaje industrial, reduciendo la "contaminación blanca". Sin embargo, los consumidores deben ser conscientes de que "biodegradable" no significa "puede desecharse y descomponerse fácilmente" y, por lo general, requiere instalaciones de tratamiento profesionales. La clasificación y ubicación adecuadas son clave para evitar mezclarlo con el reciclaje de plástico común, lo que en realidad puede afectar el reciclaje.eficiencia de adherencia.
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